MIÉRCOLES, 23 de agosto de 2023 (HealthDay News) -- Un año después del infarto de miocardio (IM), el dolor es prevalente y se asocia con un mayor riesgo de mortalidad por cualquier causa, según un estudio publicado en línea el 16 de agosto en el Journal of the American Heart Association .
Linda Vixner, P.T., Ph.D., de la Escuela de Salud y Bienestar de la Universidad de Dalarna en Falun, Suecia, y colaboradores recopilaron datos de 18 376 pacientes de menos de 75 años con un evento registrado de IM entre 2004 y 2013. En clínicas de prevención secundaria, se registraron durante un año después del alta hospitalaria los niveles de dolor experimentado informados por los propios pacientes. Se recopilaron datos de mortalidad por cualquier causa hasta 8,5 años después de la visita a un año.
Los investigadores hallaron que el 38,2 % y el 4,5 % de los pacientes incluidos informaron dolor moderado y extremo, respectivamente. Se produjo un total de 1067 muertes en la cohorte. Para el dolor moderado y extremo, los cocientes de riesgos instantáneos ajustados fueron de 1,35 y 2,06, respectivamente. En comparación con el tabaquismo, el dolor fue un factor pronóstico más fuerte de mortalidad.
“Los médicos que tratan a los pacientes después de un IM deben reconocer la necesidad de considerar el dolor experimentado como un factor pronóstico similar al tabaquismo persistente, y abordar esto al diseñar la rehabilitación cardíaca ajustada individualmente y los tratamientos de prevención secundaria”, escriben los autores.
