Expertos en neurología y pacientes se han reunido en una jornada para abordar los desafíos que enfrentan las personas con migraña en España. Aunque la migraña afecta a 5 millones de personas en el país, con un 20% de los casos siendo crónicos, existe un problema de banalización, falta de concienciación y una compleja ruta asistencial para estos pacientes.

A pesar de ser la primera causa de discapacidad en mayores de 50 años, el diagnóstico de la migraña sufre un infradiagnóstico del 40%. Esto se debe a que muchos pacientes no acuden a consulta médica pensando que no hay solución y recurren a fármacos sin receta. En España, se estima que 1 millón de personas sufren migraña crónica y otros cuatro desarrollan migrañas episódicas, siendo ocho de cada diez casos en mujeres.

El diagnóstico de la migraña suele tardar más de seis años, y los pacientes con migraña crónica tienen un retraso aún mayor, lo cual lleva a una cronificación de la enfermedad y aumenta el riesgo de desarrollar otras comorbilidades como trastornos psicológicos, trastornos del sueño, enfermedades cardiovasculares, trastornos gastrointestinales y procesos inflamatorios.

Los expertos han destacado la importancia de mejorar la ruta asistencial, aumentar la formación médica en el diagnóstico y tratamiento de la migraña, así como mejorar la comunicación entre atención primaria y especializada. También se ha señalado la necesidad de aumentar el número de unidades especializadas y garantizar un acceso equitativo a las mismas en todo el territorio.

Aunque existen tratamientos específicos para la migraña, como los anticuerpos monoclonales que bloquean el neuropéptido CGRP, su acceso es limitado. Estos tratamientos están aprobados para pacientes con cierto número de cefaleas al mes y el acceso está condicionado a tratamientos previos sin éxito. Los expertos han pedido que estos medicamentos estén disponibles como opción de primera línea.

Los nuevos fármacos han demostrado ser beneficiosos para los pacientes desde la primera dosis, pero existe un tiempo considerable entre el inicio del recorrido del paciente y su acceso a estos tratamientos. Las asociaciones de pacientes han reivindicado un mayor acceso a la innovación y una mejor información sobre la enfermedad.

En resumen, los pacientes con migraña en España enfrentan dificultades en el diagnóstico, acceso a tratamientos específicos y una ruta asistencial compleja. El infradiagnóstico y los retrasos en el tratamiento pueden llevar a la cronificación de la enfermedad y el desarrollo de comorbilidades. Se necesita mejorar la formación médica, la comunicación entre atención primaria y especializada, y garantizar un acceso equitativo a los tratamientos innovadores.